1. Si acabas de adquirir un producto hecho con lino 100% te recomendamos que, en los primeros lavados, lo separes del resto de las prendas o textiles, haciendo una separación entre colores claros y oscuros, ya que, así no te arriesgas a que puedan traspasarse colores diferentes a tus prendas de lino. Después ya puedes mezclarlo normalmente.

2. Si prefieres lavar tus prendas de lino a mano, hazlo de manera suave y nunca lo retuerzas ya que, podría perder la forma. No utilices detergentes abrasivos o blanqueantes.

3. Para escurrir el agua, tampoco retuerzas la prenda de lino.

1. Te recomendamos secar el lino en un tendedero al aire, pero que no le de el sol directo a las prendas, ya que pueden quedar tiesas y los colores pueden perder su vivacidad.

2. Si el color de tu prenda es blanca, tenderlo al aire ayuda a conservar el color.

1. La seda siempre debería ser lavada a mano, aunque las indicaciones de fábrica permitan el uso de máquina de lavar. Esto permitirá dar un trato mucho más suave y cuidadoso a este tejido.

2. Debes utilizar agua tibia, champú para bebés a modo de detergente y aromatizante o una barra de jabón neutro.

3. Luego de lavar tu prenda, puedes preparar su enjuagado con agua enriquecida con un poco de vinagre blanco destilado. Esto no solo eliminará cualquier rastro de suciedad, sino que también quitará los restos de jabón, evitando que la seda se oxide o deteriore durante el proceso de secado.

1. El algodón es una fibra más resistente, que se puede lavar en lavadora, pero si quieres conservar en perfecto estado tu prenda te recomendamos lavarla  a mano con agua fría, ya que si la temperatura del agua es muy elevada encogen y pueden perder color.

2. Las prendas estampadas o de color de puro algodón exigen un primer lavado solas para no teñir otras prendas y asegurarse que son de colores firmes.

Lavar a mano solamente en agua tibia con shampoo.